Una mayor participación de la electricidad procedente de energías renovables en el mix energético y las medidas de eficiencia son las claves que garantizarán la sostenibilidad energética de nuestro planeta. Esta es la principal conclusión del estudio llevado a cabo por la consultora noruega DNV GL, que considera que el consumo de energía solo aumentará un 7% en 2050. El grupo energético suizo Axpo, gestor de la mayor cartera de energías renovables y EcoEficientes de España, anima a las empresas en general -y a las Pymes y autónomos en particular- a contribuir a los objetivos de ‘La Hora del Planeta’, iniciativa organizada por WWF para luchar contra el cambio climático.
Según el estudio ‘Perspectivas de transición energética: un pronóstico global y regional de la transición energética a 2050’, la participación de la electricidad en el mix energético aumentará del actual 18% al 40% lo que, unido a una mayor eficiencia energética, conseguirá que el consumo mundial de energía se ralentice paulatinamente durante las próximas tres décadas.
Así, en el estudio se destacan las siguientes conclusiones:
Históricamente, el crecimiento de la energía mundial ha ido de la mano con el aumento de la población y el crecimiento económico, pero esto cambiará en las próximas tres décadas, ya que el uso de la energía global alcanzará su punto máximo y luego disminuirá drásticamente. Esto está relacionado con la aceleración de la eficiencia energética a escala global y una participación creciente de la electricidad procedente de fuentes renovables en el mix energético.
El consumo mundial de energía se estabilizará después de 2030 para luego disminuir lentamente. Los expertos calculan un incremento del consumo de energía en el año 2050 de tan solo un 7% en comparación con 2015. En cambio, el consumo mundial de energía en los últimos 15 años ha aumentado significativamente. La desaceleración en el crecimiento de la demanda se relaciona con la desaceleración del crecimiento de la población y la productividad, con mejoras más rápidas en la eficiencia energética y con la electrificación en los sectores de la calefacción y el transporte.
En el año 2050, el 85% de la producción de energía provendrá de energías renovables. La energía fotovoltaica se situará a la cabeza -con aproximadamente un tercio de participación-, seguida de la energía eólica terrestre y marina, mientras que el petróleo y el carbón disminuirán en importancia.
Situación en España
Según estadísticas de Red Eléctrica de España, la energía procedente de fuentes renovables en España durante 2017 se situó en el 33,7%. En otras palabras, uno de cada tres kilovatios tuvo un origen autóctono y limpio (viento, agua, sol o biomasa) y la previsión es que este porcentaje se incremente paulatinamente en las próximas décadas. “La responsabilidad medioambiental representa una importante oportunidad y obligación para las empresas, que pueden y deben demostrar a sus clientes su compromiso medioambiental generando una imagen de marca sostenible que se manifiesta, por ejemplo, con el consumo de energías ecoeficientes. Sin embargo, no basta con consumir energías limpias, sino que resulta imprescindible entrar en la senda de la eficiencia energética permitiéndonos, por ejemplo, racionalizar el consumo“, señaló a este respecto el director general de Axpo.
El último Eurobarómetro Pyme, elaborado por la U.E., destacaba que el 93% de las pymes europeas ya toma medidas para ser más eficientes en la utilización de los recursos. Sin embargo, más del 80% de las pymes españolas aún no han puesto en marcha medidas y planes de eficiencia energética, que no solo aportan beneficios medioambientales, sino que podrían reducir considerablemente sus facturas. Según varios estudios, una pyme media podría ahorrar en torno a un 30%, lo que supondría unos 4.500 € al año en su factura energética.