Actualmente, uno de los mayores problemas a los que se enfrenta la expansión del coche eléctrico es la falta de infraestructura de carga. A pesar de que poco a poco las redes de carga pública se van extendiendo, hay ciertos lugares a los que la red eléctrica no llega, lo cual puede suponer un problema a la hora de realizar viajes por lugares exóticos.
Por ello, la empresa Yeop Baek ha desarrollado una original solución para enfrentarse a este problema: Volt, un dron de cuatro hélices dotado de una batería portátil que es capaz de viajar a cualquier zona geográfica para darle carga a un coche eléctrico. Una solución que vendrá de perlas a aquellas personas que quieran realizar rutas en zonas remotas de la civilización.
Para acceder a este servicio, simplemente hará falta entrar a una aplicación de smartphone, que nos permitirá solicitar el dron, pagar y utilizarlo para cargar nuestro coche eléctrico. Estos drones de cuatro hélices cuentan con una estructura muy estable, así como con cuatro patas ubicadas debajo de cada hélice, gracias a las cuales se reduce el impacto al aterrizar.
El dron está equipado con sendas cámaras en la parte delantera y en la trasera. Gracias a ellas puede identificar obstáculos, así como al vehículo del usuario. Así, disminuyen las posibilidades de que el dron o la batería integrada en su estructura sufran daños por accidente.
La aplicación del Volt permite a los usuarios registrar la información relativa a su vehículo y su ubicación, identificando aquellas áreas de servicio que estén más cerca. Gracias a la información facilitada por el usuario, el Volt identificará qué tipo de vehículo tiene para así cargar la batería correcta. La toma de carga está oculta dentro del dron. Una vez el dron llega al usuario, la cubierta superior se abre, revelando la toma de carga. Así, los usuarios pueden sacarla y recargar su coche.