Durante su participación en el programa Café de Periodistas del 29 de abril, Juan Alberto Gutiérrez, presidente de ASINELTE y vicepresidente de la Federación del Metal de Tenerife, lanzó una seria advertencia sobre la situación crítica del sistema eléctrico en Canarias. En un contexto marcado por el gran apagón que afectó a la península ibérica y parte de Europa, Gutiérrez destacó que, aunque las islas no se vieron directamente afectadas, su sistema energético tampoco está preparado para un evento de gran escala.
Diagnóstico claro: un sistema “deficitario y obsoleto”
“La mayoría de los grupos de generación en Canarias han superado su vida útil”, afirmó Gutiérrez, dejando en evidencia una falta de renovación tecnológica que pone en riesgo la estabilidad energética del archipiélago.
Además, señaló que el problema no es solo de generación, sino que afecta también a la red de transporte y distribución, con infraestructuras que no cumplen con los requisitos actuales de eficiencia ni de sostenibilidad.
Instalaciones nuevas, pero lentas
Aunque reconoció que se han importado nuevos grupos electrógenos, aclaró que estos aún deben ser instalados y ubicados estratégicamente tras estudios técnicos. Mencionó ubicaciones como Los Realejos, la Dársena Pesquera o el polígono de La Campana.
“No se puede hacer un chasquido de dedos. Esto requiere tiempo, inversión y planificación”, remarcó.
¿Y las energías renovables?
Gutiérrez también criticó la falta de consenso social en torno a las energías renovables:
“Todos quieren energía limpia, pero nadie quiere un molino frente a su casa. Nadie quiere torres eléctricas en su municipio.”
Este dilema, subrayó, ralentiza la transición energética en el archipiélago, dejando al sistema vulnerable.
Conclusión: necesitamos un sistema robusto
La intervención de Juan Alberto Gutiérrez fue un llamado al sentido común: renovar, planificar y asumir colectivamente la necesidad de contar con un sistema eléctrico moderno, eficiente y resiliente.